Salomão Gabriel: un hombre que dejó saudades

Osmarina Galvão Costa*

| 4 Octubre, 2025

[…] cuando éramos niños, todos nosotros, la mayoría de los sobrinos, queríamos ser como él cuando creciéramos, porque realmente era una persona admirable”. M. Jamsson Ferreira de Oliveira.

Salomão Gabriel da Costa, nacido en el Seringal Sunta durante una sesión de Vegetal, cumpliría hoy 62 años. Según Mestre Pequenina, cuando se acercaban las 22 horas de aquel 4 de octubre de 1963, Mestre Gabriel preguntó cuál de las hermanas presentes podría ayudar en la llegada de otro caianinho. En ese momento, la hermana Roxinha se presentó y acompañó a Mestre Pequenina hasta la habitación.

Mestre Pequenina contaba que cuando entró en la habitación, vio una alcoba grande y hermosa, algo que nunca había visto antes. Y dentro de ese encanto en el que se encontraba, nació en un parto sin dolor el octavo hijo de la pareja. Tras el nacimiento del niño, Mestre Gabriel dijo que aún faltaba una persona por beber el Vegetal. Tomó una cuchara, puso el Vegetal y se acercó a donde estaban su compañera, Mestre Pequenina, y el hijo recién nacido, y dijo: “Recibe la comunión del Vegetal, Salomão”. Y, en ese momento, le dio el nombre de Salomão a ese niño que acababa de nacer.

Para mí, siempre fue muy emocionante escuchar a Mestre Pequenina contar sobre el nacimiento de Salomão Gabriel. Cuando lo conocí, él era el responsable de la casa y del mantenimiento del hogar junto con su madre. Y lo que más me cautivó de Salomão fue ver el amor y el respeto que sentía por sus padres, Mestre Gabriel y Mestre Pequenina, cuidando de su madre siempre con amor. Del mismo modo, me llamó la atención el respeto y el amor que sentía y demostraba por su hermano mayor, Getúlio, y todos los demás.

Salomão fue un hijo respetuoso, amoroso y firme en todo lo que hizo. Fue un esposo presente, compañero y fiel en su amor por mí y por la familia que construimos: mis dos hijos, el hijo de Salomão y nuestro hijo, formando así nuestra familia con nuestros cuatro hijos: Leandro, Cleiton, Leomiro y Soniê.

Hoy, 4 de octubre, es un día de alegría en el seno de nuestra familia por el nacimiento de Salomão Gabriel. Y aquí quiero rendirle homenaje y honrar su memoria desde la mirada de nuestros hijos Leandro, Cleiton, Leomiro y Soniê, y de nuestros queridos sobrinos, C. Joelson y M. Jamsson Ferreira de Oliveira.


“Salomão, que conoció a mi madre cuando yo tenía aproximadamente siete años, fue un padre y un amigo en mi vida. Un tesoro inestimable que él le ofreció a mi madre, y que se extendió a mí y a mis hermanos, es la Unión del Vegetal. Un recuerdo imborrable es cuando cumplí doce años. Él dirigía una Sesión y me dedicó un discurso de padre celoso y amoroso, y me dedicó la canción “O filho do seu menino virou rapaz” (El hijo de su niño se hizo muchacho), de Jair Rodrigues, un gesto que simbolizó su papel de padre presente y amigo.

>>>>Mestre Leandro dos Anjos (Mestre Representante del Núcleo São Miguel, Porto Velho-RO, 1ª Región);

“El Consejero Salomão entró en mi vida cuando yo era muy pequeño. Llegó y llenó el vacío de la figura paterna. Tenía una energía que hacía que todos los que le rodeaban quisieran estar siempre cerca de él.

Las sesiones con él siempre eran especiales. Era muy participativo y aportaba numerosas enseñanzas. Siento gratitud por haber tenido el privilegio de convivir con él. Espero que algún día nuestra familia tenga el privilegio de continuar esta historia. ¡Que Dios y el Mestre nos bendigan!”

>>Cleiton dos Anjos (socio del Núcleo São Miguel, Porto Velho-RO, 1ª Región);

“¡Mi infancia con mi padre fue un regalo de Dios! Con él aprendí la riqueza de ser un buen hijo, un buen amigo, un buen hombre y que respeta y valora los principios de ser una buena persona para la sociedad.

Pude presenciar lo que era mi padre: un amigo, un padre, un consejero, un maestro en las artes marciales, un hombre serio, trabajador, amable y al que le gustaba bromear y jugar al fútbol…

Era un hombre que honraba a su familia, ¡especialmente a su padre y a su madre!”

>>Leomiro Gabriel da Costa (socio del N. Mestre Pequenina, Porto Velho-RO, 1ª Región);

Salomão Gabriel, “mi héroe”

“Desde niño, crecí escuchando a mis familiares hablar sobre mi padre, Salomão Gabriel. Entre tantas historias, hay un momento que quedó grabado en mi corazón: mi abuela, Mestre Pequenina, lo llamaba “mi héroe” y le tenía un gran cariño y amor. Y así fue como aprendí a verlo como una persona única, que marcó la vida de todos los que lo rodeaban.

Tenía algo que lo destacaba: el don de las artes marciales. Era un experto en artes marciales y técnicas de combate, pero su habilidad iba más allá de la fuerza física; tenía disciplina, lealtad y personalidad, cualidades que inspiraban a quienes convivían con él. También tenía facilidad para transmitir las enseñanzas, preparar el Vegetal y fue profesor de algunos, dejando su huella en la vida de aquellos que tuvieron la oportunidad de aprender con él. Esas mismas personas cuentan que tenía maestría en todo lo que hacía, pero también una riqueza espiritual, y sin duda habría llegado a puestos altos dentro de la Unión.

A pesar de haber convivido poco tiempo, siento que su esencia forma parte de mí. Y a veces, en un gesto, en un pensamiento o incluso en el silencio, siento su presencia conmigo.

Soniê Gabriel da Costa (Cuerpo Instructivo del N. Mestre Pequenina, Porto Velho-RO, 1ª Región);


“…una persona memorable, admirable”

“Tuve la oportunidad de convivir durante muchos años con el Consejero Salomão Gabriel. Tenía muchas cualidades y causaba admiración en diversos aspectos. Lo admiraba por su destreza en las artes marciales (fue lo primero que me llamó la atención) y también por su talento para preparar Vegetal, dirigir Sesiones y por el conocimiento que tenía. Aprendí muchas cosas con él.

Era una persona memorable, admirable y atenta. Tenía una personalidad fuerte y no siempre fue bien comprendido o bien interpretado. Tenía la capacidad de reconocer sus actitudes, sus errores, y lo vi durante el camino haciendo cambios en su forma de ser para mejor. A veces imagino que si hubiera encarnado hoy en día, cuánto estaría ayudando en la Unión del Vegetal.”

Consejero Joelson Ferreira de Oliveira (Núcleo Convite aos Encantos – Formosa-GO, 8ª Región);


“…yo siempre revivo ese pasado”

“Hablar del tío Salomão es revivir el pasado. Pero yo siempre revivo ese pasado, porque aún hoy lo recuerdo. Prácticamente todos los días hablo de él. Fue la persona que me enseñó las artes marciales, me enseñó el arte de la capoeira, del boxeo, y hoy doy clases de estas artes. Así que siempre estoy hablando de sus enseñanzas, de su historia. Ayudaba a mucha gente y lo hacía sin alardes, sin propaganda. Muchas veces, la gente ni siquiera lo sabía. Mucha gente solo se enteró de algún bien que él había hecho después de que falleciera.

Incluso aquella señora, la madre de leche, la señora Roxinha, era una persona a la que él siempre ayudaba con comida, con dinero, con una cesta básica. Nunca dejaba que le faltara nada. Sentía un cariño especial por la señora Roxinha.

Aprendí mucho con él: algunas cosas de la Unión, las enseñanzas del Mestre Gabriel, la preparación del Vegetal. También aprendí cómo debe comportarse y posicionarse un hombre: un hombre tiene la palabra firme, sabe cuál es su lugar, sabe entrar y salir de los lugares. Tenía una gran inteligencia, una habilidad muy refinada en relación con la preparación del Vegetal. Y su palabra siempre era bien equilibrada dentro del Salón del Vegetal.

Recuerdo que, cuando éramos niños, todos nosotros, la mayoría de los sobrinos, queríamos ser como él cuando creciéramos, porque realmente era una persona admirable.

Cuando se fue, dejó un gran vacío en nuestras vidas. Pero aún hoy siento que llevo algo de él dentro de mí: su presencia, su fuerza, sus enseñanzas. Todavía hoy enseño el arte de la capoeira que aprendí de él y preservo su legado. Esa es la forma que encontré de mantenerlo vivo para mí y conservar una de las mayores amistades que he tenido.

M. Jamsson Ferreira de Oliveira, Mestre Asistente Central da 8ª Región;


“…una estrella que brilló”

Salomão Gabriel llegó al Cuerpo del Consejo el 1 de noviembre de 1988, en el Núcleo Mestre Iagora (Porto Velho-RO), y falleció en 1999, a los 35 años, dejando a nuestra familia y amigos buenos recuerdos de convivencia y amistad. Cuando aún era niño, su fotografía ilustró el reportaje “El LSD del Amazonas”, publicado en 1971 en la revista O Cruzeiro (imagen principal de este homenaje). Para nuestro hijo Soniê, “su paso por la Tierra es como el de una estrella que brilló con intensidad y se apagó demasiado pronto, dejando recuerdos y memorias a quienes lo conocieron de cerca”.


*Osmarina Galvão Costa es viuda del Consejero Salomão Gabriel e integra el Cuerpo del Consejo del Núcleo Mestre Pequenina (Porto Velho-RO, 1ª Región).

Nota del editor: En 2009 se inauguró el entonces Pre-Núcleo Conselheiro Salomão Gabriel en João Pessoa, Paraíba. Según el actual Mestre Representante del Núcleo Salomão Gabriel, Mestre Clóvis Neto, a partir de una petición de Mestre Pequenina, “se creó el Núcleo Conselheiro Salomão Gabriel en la 10ª Región, como forma de homenajear al ‘gran héroe’ de Mestre Pequenina. Todos los que formamos parte del Núcleo Consejero Salomão Gabriel nos sentimos honrados de formar parte de esta Gran Unión del Vegetal, rindiendo homenaje a un querido hijo de Mestre Pequenina y de nuestro Gran Mestre Gabriel”.